miércoles

Tema No. 2

Diversos tipos de cantos
Ambientación o dinámica.
Este tipo de cantos se utilizan para por lo menos dos situaciones conocidas:
a) Reunir a los hermanos cuando se inicia o después de algún momento de descanzo.
b) Hacer que los heramanos tengan un momento para hacer movimientos de relajación.
Como indica lo anterior, deben de ser cantos que expresen movimiento y alegría los cuales, se utilizarán solo para los que se necesiten y en breves momentos.

Alabanza.
Con estos cantos se inicia propiamente la asamblea de oración, ya que este tipo de cantos expresan la fe con alegría, con júbilo y preparan al pueblo para empezar el camino que lo llevará a la presencia de Dios.

Estos cantos son muy alegres y motivadores cuya letra menciona alguno de los atributos de Dios (es decir, que es grande, poderoso, misericordioso), invitan también a la danza, levantar las manos, aplaudir y a las expresiones de júbilo.
Es importante entender que los cantos de alabanza deben tocarse con la rítmica adecuada, por ejemplo el canto de danza debe invitar a danzar, y no llevar una rítmica muy lenta y que no invita a la danza.


Glorificación.
En este tipo de cantos se menciona como idea principal la glorificación del Señor, es decir, darle una suprema alabanza al único Dios por ser quien es, por lo que ha hecho, y porque nos invita a vivir en la gloria, es decir en su presencia para siempre.


Exaltación.
Estos cantos nos invitan a declarar que el Señor Jesús merece ser levantado en el lugar supremo, el más alto de toda la creación, así como de los corazones de los fieles.
Nosotros su pueblo, exaltamos al Señor Jesús declarando que encima de Él no hay otro, y esto sucede no solo porque nosotros lo afirmemos, sino porque a El se le ha dado el nombre que está sobre todo nombre.
Con esto también afirmamos que es la persona más importante en nuestras vidas y que debemos recordar en cada momento de nuestra existencia que hay alguien que nos puede ayudar en cualquier situación, ya que se le ha dado el poder en los cielos, en la tierra y en todo lugar.


Acción de gracias.
Este tipo de cantos evidentemente, son para dar gracias a Dios, reconociendo que todas las bendiciones que se nos dan provienen de su infinita misericordia.


Invocación al Espíritu Santo.
Es necesario invocar continuamente la presencia del Espíritu Santo en la asamblea de oración, pues aunque Él es el que hace que nos reunamos y está presente en todo lugar, es necesaria su ayuda para poder alabar a Dios, para que se manifiesten los carismas, para transformar los corazones y para que se haga evidente la presencia de Dios.
No es una invocación mágica o misteriosa ni nada por el estilo, y mucho menos es algo que toma posesión de las personas y hace con ellas lo que quiere sin ningún control, es más bien preparar los corazones de los fieles para que puedan ser receptivos a la profundidad del amor de Dios y los regalos (dones y carismas) que da a los que creen en Jesús como su Señor y Salvador.


Cantos de arrepentimiento.
Al tener un encuentro con la santidad del Señor Jesús, nos revela nuestros pecados y limitaciones, no porque El sea un juez implacable, sino más bien para que podamos entrar con una vestidura blanca a su presencia.
Estos cantos nos ayudan a reconocer nuestras faltas y arrepentirnos, pero además nos muestra la gran misericordia que Él tiene con aquellos que reconocen sus culpas y se arrepienten.

Aunque la letra del canto suele ser muy personal, se aplica a cada uno de los fieles y por lo mismo el ritmo del canto debe ayudar al recogimiento.


Cantos de entrega personal.
Cuando los fieles han reconocido sus faltas, están preparados para abrir sus corazones y acpetar el Señorio de Jesús en sus vidas; para esto la letra del canto debe hablar de una entrega personal, decidida a rechazar todo aquello que lo aleja del Señor, de todo aquello que lo hace dudar o temer, para confiar su vida en las manos del Señor Jesús.
El ritmo de este canto debe ser suave y apacible, que ayude a la interiorización de los fieles, centrándonos más en ofrecer su vida al Señor que está presente.


Cantos de adoración.
Estos cantos preparan a los fieles a entregar sus vidas en adoración, reconociendo que Jesús es el único Dios verdadero.
La adoración es el acto más sublime e importante que cualquier persona puede realizar, por lo mismo los cantos de adoración deben ayudar al recogimiento, a centrar la atención de los fieles en lo que es importante y no ser repetitivos y machacantes en su letra e interpretación.
Éstos cantos deben llevar al silencio espiritual, en donde ya no hacen más falta palabras o cantos, sino solamente dejarse llenar de la presencia de Dios.


Canto de Salida.
Este canto puede tener la línea de cualquiera de los cantos anteriores. Solo que la importancia de este canto está en que ayuda a reafirmar lo que se compartió en la asamblea de oración. Los fieles se regresan a sus casas a sus trabajos, a su escuela, recordando el canto que les recordará a su vez las maravillas que el Señor Jesús realizó en la asamblea.